Imatge de Jimmy Liao
Los instrumentos soplaban lamentos, Caperucita,
entre la paciencia y el nervio avanzaban.
La castañera pelaba boniatos
y un olor a carbón invadía las calles,
que sigilosamente andaban.
Cantaban los pájaros su despedida,
Otoño había llegado y con él
la melancolía del Verano.
La gente bajaba a los túneles
envueltos por Viento,
que subía corriendo escaleras
perseguido por Metro,
que cada tres minutos vaciaba los andenes.
Y así la familia Metro al completo
transportaba a la gente de hogar al trabajo
y del trabajo al calor del hogar, continuamente.
Recuerdo, andaba tras Pasado y Presente,
su hermana Melancolía caminaba, dulce y amarga.
Pasado tras Presente eternamente y Futuro al frente,
misterioso y enigmático, siempre con permiso de Tiempo,
sinónimo de cambios y soplaban vientos.
Por fin llegó la Primavera y los niños amapola,
la música triste se llenó de color
y la ciudad entera salió a las calles a saludar a Sol.
Los días se alargaron y con ellos perdió el sentido esta canción,
gris y desencantada.
Hasta el próximo Invierno hermanos y hermanas.
Letargo es una canción de Facto Delafé y las flores azules. Es poesía pura recitada al compás de una música sencilla que adorna de intención la letra.
La propuesta es la siguiente. Tras varias escuchas, nos damos cuenta que aparecen algunos nombres comunes como propios. Vamos a darles forma, silueta y vida. Vamos a crear un texto de personajes tomando como protagonistas estos elementos que no acostumbran a tener identidad propia. Es vuestro trabajo dotarles de una personalidad, si queréis acorde con el texto que hemos leído. Cread un relato para uno de ellos, haciendo que se sientan protagonistas de vuestras historias.
Os dejo una muestra, podéis mejorarlo sin ninguna duda.
RECUERDO, de Maria Chamón.
Recuerdo andaba tras Pasado y Presente. De la mano de Melancolía, Tristeza y Olvido.
Con paso firme y con una dirección clara, dibujando media sonrisa en su rostro, sintiéndose alguien por última vez. Harto de vivir anclado en un lugar sin nombre, sin música y sin luz. Había cerrado la puerta de su casa, dos vueltas, llave al río. Memoria quedaba lejos, era una ciudad a la que no regresaría, pues en el fondo deseaba verla destruida, atacada por Culpa y bombardeada hasta ser diluida en el foso más profundo de Universo.
Huía sereno, impasible y decidido. Tras varios intentos decidió lanzarse a un nuevo e intenso viaje de ida. Sin embargo, sus tres acompañantes lo abandonarían en poco tiempo. La primera sería Melancolía, nunca hizo el equipaje completo por pura incapacidad de decidir. Después sería Tristeza quien daría media vuelta, seguía enamorada de Drama y la historia entre ambos aún no había llegado a su fin.
Finalmente Olvido, su fiel compañero, sería el último en fallar. Justo en el momento de saltar al vacío, para cumplir su eterna promesa, justo en el instante en que sus miradas se debían cruzar por última vez, cuando querían precipitarse al ritmo de tres, dos, uno… Cuando el aliento era el impulso para marchar…
Recuerdo desaparece en la nada. Y es Olvido quien ocupa su lugar.